Adam Benett y su amigo Yoav Ben David han rescatado a más de 600 animales, entre ellos unos 430 perros, 200 gatos, pájaros, peces y cobayas; en el sur de Israel; desde la masacre terrorista del 7 de octubre perpetrada por Hamás.
«El 10 de octubre me uní a mi amigo Yoav para rescatar perros en el sur. Pensábamos que se trataba de 10 ó 15. No sabíamos el alcance de la crisis», dijo Benett, de 30 años, del kibbutz Kvutzat Shiller, a JNS. «Entonces publiqué en Facebook para que todo el mundo supiera que íbamos a ir y ofrecer ayuda a quienes les hiciera falta una mascota«.
En pocas horas Benett había recibido miles de llamadas telefónicas y más de 800 mensajes de voluntarios y familias, que buscaban recuperar sus mascotas.
Él y Ben David trabajaron toda la noche para recopilar información, presentar la documentación y estar listos para poner en marcha su nueva organización: “Mechaltzim Ve’nehenim” al día siguiente.
«Nos aseguramos de obtener los permisos para entrar en Sderot por parte de los equipos de rescate, aunque los terroristas seguían activos en la zona», explicó Benett. «Algunos de nosotros fuimos escoltados por las Fuerzas de Defensa de Israel [FDI], otros esperaron hasta que fuera seguro entrar por sí mismos».
Benett abrió un centro de operaciones en Beit Kama, situado a 30 minutos de Sderot; para recibir a los animales rescatados. Allí son identificados y con suerte, reunidos con sus dueños. En caso contrario, la organización les busca hogares de acogida o los envía a clínicas avanzadas para que reciban tratamiento.
Benett cuenta que, aunque el proceso de identificación fue muy sencillo, ya que por ley, todo propietario de un animal de compañía en Israel debe ser registrado; pero encontrar y capturar a las mascotas fue más complicado.
«El primer día estábamos sobre el terreno y no sabíamos muy bien lo que hacíamos. Luego, algunos de los voluntarios que se unieron a nosotros eran perreros profesionales y personal médico. Estaban perfectamente entrenados para estar ahí», explica.
Entre los voluntarios está Tami, de 53 años, de Mishmar Ayalon, que trabaja en la interface de usuario del David’s Sling, un sistema de defensa aérea diseñado para interceptar amenazas de misiles.
«Me ofrecí voluntaria todos los días. Detuve mis actividades por completo y le dije a mi jefe que los perros me necesitaban más que mi lugar de trabajo», dijo Tami a JNS.
Contó que fue mordida por un pequinés aterrorizado, que había sido abandonado a su suerte durante días, en una zona constantemente bombardeada por cohetes de Hamás.
Sin embargo, dice que había magia en el aire, cada vez que los voluntarios se reunían para salvar a los animales.
«Adam y Yoav son magos. Se merecen todo el reconocimiento», afirma Tami. «Nos ayudaron a unirnos todos como un equipo y ayudar a más de 600 animales. Nos sincronizamos como si hubiéramos estado practicando para esto desde siempre. Tanto amor, dicha y bien, llegaron a esta zona de guerra cuando empezamos».
Aunque Tami dice que “no tuve miedo a pesar de que los terroristas seguían rondando por el sur” cuando se ofreció voluntaria por primera vez, recuerda una noche en la que sonaron las alertas mientras su equipo intentaba asegurar a un loro, que volaba por el interior de una casa.
«Ni siquiera era una sirena, era una voz en un megáfono; que nos pedía que buscáramos refugio. Teníamos unos segundos para llegar al suelo cuando un cohete aterrizó a unos 100 metros de nosotros», explicó.
«He vivido casi toda mi vida en Israel, pero fué la primera vez que escuché una explosión tan cerca. Eso realmente cambia algo dentro de ti», dijo.
Karin Ofek Burshtein, de 42 años, de Emek Hahula; es veterinaria voluntaria del grupo de rescate.
«He tratado animales con dolor físico y emocional. Algunos estaban hambrientos, deshidratados y asustados; otros tenían heridas de bala o de andar por ahí. Los enviamos al hospital veterinario más cercano para que recibieran tratamiento. Incluso tuvimos un pollito hipotérmico», dijo Burshtein a JNS.
«Algunos animales sufrían estrés postraumático. Comían sin parar o se negaban a alimentarse. Algunos ladraban sin motivo, otros incluso tenían pesadillas y lloraban en mitad de la noche; mientras que otros estaban sin vida», añadió.
Yair, de 22 años, de Nahal Oz; sobrevivió al asalto de Hamás del 7 de octubre. Se puso en contacto con Benett para recuperar a su perro.
«Cuando los terroristas de Hamás lanzaron el asalto contra el festival, huí y me escondí en el bosque durante horas», dijo Yair a JNS. «Luego caminé hasta Netivot y me quedé allí una noche, antes de reunirme con mi familia en Mishmar HaEmek, en el norte. Todo el tiempo no podía dejar de pensar en mi perra, con la esperanza de que siguiera viva», dijo.
«Es una rescatada de Gaza, un grupo de personas que trabajaban en el campo la encontró cerca de la frontera, estaba gravemente traumatizada», continuó, y añadió: «La tengo desde entonces. Me preocupaba su salud mental, pero ha estado mucho mejor de lo que esperaba desde que nos reunimos».
Benett, que no sirvió en las FDI, dijo a JNS que “ésta era su forma de devolverle algo a la nación”.
«Ayudar a mi país y a mi gente, reuniéndolos con el último miembro desaparecido de sus familias es la mejor sensación del mundo», afirmó.
Publicado el 15 de noviembre de 2023
ENFOQUE DE ORACIÓN: Oremos por Mejaltzim Ve’nehenim mientras avanzan en su misión de reunir a las mascotas con sus legítimos dueños. Oremos por estos valientes voluntarios que están comprometidos a reunir a los israelíes con los “últimos miembros desaparecidos de sus familias” y por el éxito de sus esfuerzos.
VERSO BÍBLICO: «El Señor está cerca de los que tienen quebrantado el corazón; él rescata a los de espíritu destrozado«.
– Sal 34:18 NBLA
Publicado en noviembre 17, 2023
Fotografía por: Courtesy/jns.org
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