A pesar de las preocupaciones pasadas de Israel sobre una incursión terrestre en Gaza, la guerra actual está demostrando ir por buen camino. Los combatientes de Hamás se retiran del enfrentamiento contra las Fuerzas de Defensa de Israel [FDI], tras haber apostado erróneamente por una ofensiva israelí ‘limitada’ –para evitar víctimas y por la presión internacional–.
Las imágenes difundidas el jueves muestran a un gran número de hombres, algunos que se rindieron a las tropas y otros que fueron capturados; sentados en el suelo, despojados de sus ropas, bajo la vigilancia de las tropas israelíes. Las agresivas maniobras del ejército han conseguido eliminar las capacidades militares de Hamás.
Todavía hay muchas zonas en Gaza donde continúan los combates. Las fuerzas aún no han entrado en los campos de refugiados del centro de la Franja, ni en Rafah en el sur. Pero ya ahora es evidente que el gobierno central de Hamás, en la ciudad de Gaza y en los alrededores de Khan Younis, se está derrumbando a la vista de todo Medio Oriente, que está recibiendo bien el mensaje. Si la guerra continúa, Hamás se enfrentará a una derrota militar.
A pesar del fuego de Jizbolá en el norte y de los rebeldes Houthi de Yemen, que tienen como objetivo Eilat en el sur, Gaza está sola. El grupo terrorista libanés respaldado por Irán no ha iniciado una guerra total contra Israel y, tras dos meses de fuego limitado, no parece dispuesto a ampliar sus ofensivas. Ya han muerto unos 100 combatientes de Jizbolá, pero el mundo musulmán suní critica a los terroristas chiítas, que no parecen hacer más que lo mínimo en la lucha contra los judíos. Jizbolá y sus amos en Irán tienen buenas razones para evitar una guerra total después de que las imágenes de destrucción en Gaza les recordaran la potencia de fuego, que disponen las FDI.
En Gaza se oyen condenas lentas pero crecientes contra Hamás, mientras que la mayoría de los civiles siguen apoyando al grupo y su popularidad aumenta en Cisjordania [Judea y Samaria]. Pero después de que los terroristas de Hamás usurparan la ayuda humanitaria entregada por las Naciones Unidas para los civiles y el combustible necesario para infraestructuras críticas, y mientras los líderes de Hamás se esconden en túneles subterráneos dejando a la población sobre el terreno expuesta a la guerra y a los elementos, crece la ira contra los gobernantes que han gobernado ya por mucho tiempo.
Gaza se está desmoronando. Muchos se vieron obligados a abandonar sus hogares en las zonas del norte, en los primeros días de la guerra y ahora en Khan Younis y otras ciudades del sur. Es posible que no tengan hogares a los que regresar tras los combates.
Hamás ni siquiera intenta ofrecer soluciones a los desplazados y sus dirigentes permanecen escondidos mientras sus operativos roban lo que pueden de los suministros humanitarios. Los gazatíes entienden que Hamás y su líder Yahya Sinwar son responsables de su destino.
El grupo terrorista esperaba que los ciudadanos árabes israelíes se alzaran contra Israel después de que se amotinaran durante el conflicto de mayo de 2021. Pero las atrocidades cometidas por los terroristas el 7 de octubre podrían ser parte de la razón por la que parece haber poco apoyo al grupo. Entre las víctimas del ataque había israelíes musulmanes y algunos han sido capturados y mantenidos como rehenes en Gaza. En las encuestas, el sector árabe aumentó su afiliación a la sociedad israelí en general desde que empezó la guerra.
En Cisjordania, Hamás tampoco ha conseguido incitar a un levantamiento violento contra Israel. Los intentos de atentados terroristas son cotidianos, pero el llamamiento del líder del ala militar de Hamás, Muhammed Deif, a los palestinos de la zona a tomar las armas, ha quedado en su mayor parte sin respuesta. La Autoridad Palestina [AP], que también fue llamada por Deif a luchar contra las fuerzas israelíes, sigue manteniendo en silencio la cooperación en materia de seguridad con sus homólogos de las FDI y el Shin Bet [Agencia de Seguridad de Israel], mientras las fuerzas realizan redadas en puntos calientes y detienen a un gran número de operativos de Hamás.
Estados Unidos ha dado luz verde a Israel para continuar su ofensiva al menos hasta enero de 2024. Aunque la condena internacional de la acción israelí continúa, Washington parece no inmutarse.
Aunque la opinión pública apoya a Hamás en la guerra, los esfuerzos por sacar a la luz las atrocidades cometidas por los terroristas están empezando a cambiar la marea. La guerra en Gaza ya no es la protagonista de los reportajes de los medios de comunicación mundiales, que han pasado a ocuparse de otras historias. Se acerca la Navidad y el interés por los asuntos internacionales disminuye.
En Israel, la población ha demostrado su entereza ante el desastre sufrido en el asalto de Hamás. A pesar de la fractura de la sociedad, los israelíes demostraron ser fuertes.
Aunque muchos israelíes luchan contra los horribles acontecimientos del ataque de Hamás, se preocupan por los rehenes en Gaza y por las tropas que luchan en la guerra, y aunque el futuro en la Franja y dentro de Israel no está claro, hay algunos logros que deben ser señalados y celebrados.
Publicado el 8 de diciembre de 2023
Publicado en diciembre 9, 2023
Fotografía por: IDF/Wikimedia.org
Fotografía con licencia: Wikimedia
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