NOTICIAS

Las FDI eliminan a un agente clave de Jizbolá durante la pausa en el lanzamiento de cohetes

junio 18, 2024

La última vez que Jizbolá se atribuyó la responsabilidad de cualquier ataque contra Israel fue, el sábado alrededor de las 14:00 horas, cuando afirmó haber atacado una base militar en la frontera con un enjambre de drones. Las Fuerzas de Defensa de Israel [FDI] por su parte, no han cesado el fuego, y el lunes Jizbolá anunció la eliminación de otro operativo: Muhammad Mustafa Ayoub, de la ciudad de Selaa, en el sur del Líbano.

Horas después del ataque, las FDI publicaron documentación del ataque contra Ayoub, a quien se le describió como “un operativo clave en el Departamento de Cohetes y Misiles de la Unidad Nasser de Jizbolá”.

En los últimos meses, Ayoub participó en la promoción de ataques terroristas contra civiles y comunidades israelíes. Promovió y planificó ataques terroristas desde el sur del Líbano contra el Estado de Israel, según las FDI.

«Su eliminación es parte de la actividad de las FDI y de las fuerzas de seguridad israelíes para impedir el fortalecimiento militar de Jizbolá, en términos de armamento y su almacenamiento de armas designadas para su uso, en ataques terroristas contra civiles y comunidades israelíes», dijo el ejército en un comunicado.

Jizbolá se ha comprometido a seguir luchando en el norte, mientras las FDI continúen sus operaciones en la Franja de Gaza, por lo que la pausa en los ataques de los últimos días es inusual. Una posible razón de la tranquilidad actual es la festividad de Eid al-Adha, o Fiesta del Sacrificio, que incluye oraciones masivas de los residentes del sur del Líbano. El cese de los ataques de Jizbolá permitió que algunos residentes regresaran a sus hogares, suponiendo que las FDI no atacarán con tanta fuerza como en los últimos días, mientras la organización terrorista no devuelva el fuego. De esta manera, los libaneses también recibieron un cierto respiro ante la grave escalada de los combates de las últimas semanas, impuesta por Jizbolá.

En el contexto de esta pausa, el primer ministro Benjamín Netanyahu, el presidente Isaac Herzog y el líder de la oposición Yair Lapid; se reunieron el lunes (por separado) con el enviado del presidente estadounidense Joe Biden a la región, Amos Hochstein. El enviado estadounidense vino como parte de los esfuerzos para lograr una solución diplomática en el norte. Tanto en Israel como en Estados Unidos se entiende que su trabajo depende principalmente de una cosa: un alto al fuego en Gaza. Si esto no se promueve, lo único que puede hacer es preparar un acuerdo que traiga la calma a la zona norte y esperar un acuerdo de rehenes que detenga el lanzamiento de cohetes.

Herzog se reunió con Hochstein y habló con él sobre los incesantes ataques y disparos de Jizbolá y la “necesidad urgente” de restaurar la seguridad en la frontera norte y a los residentes en sus hogares. El presidente dejó claro a Hochstein que la clave para una solución: “es la liberación de los rehenes israelíes” que llevan más de ocho meses retenidos en la Franja de Gaza.

Al mismo tiempo, Hochstein también está tratando de frenar a Israel, después de la declaración del portavoz de las FDI a los medios extranjeros anoche, en la que afirmó que “la creciente agresión de Jizbolá nos está llevando al borde de lo que podría ser una escalada más amplia, una que podría tener consecuencias devastadoras para el Líbano y toda la región”. El Almirante Daniel Hagari también pidió al Líbano que utilice su influencia sobre Jizbolá, aunque sea muy pequeña.

Se espera que el enviado especial de Biden viaje a Beirut, donde se reunirá con el presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri, el primer ministro Najib Mikati y el ministro de Asuntos Exteriores, Abdallah Bou Habib.

Detrás de estos frecuentes viajes a la región, hay un gran temor estadounidense de que el conflicto se convierta en una guerra en múltiples escenarios. Los estadounidenses advierten que una “guerra limitada” también podría salirse de control y en tal situación, llevar a Irán y a las milicias chiítas al conflicto.

En este contexto, el foro ‘Luchando por el Norte’ —que reúne a alrededor de mil evacuados y residentes— publicó una carta abierta pidiendo a Netanyahu que no llegue a un acuerdo de “rendición” con Jizbolá, que no les permitiría regresar a sus hogares de forma segura. El temor de los residentes es que incluso, después de la Segunda Guerra del Líbano que terminó con la Resolución 1701 de la ONU, Jizbolá no respetó el acuerdo y de hecho, tomó el control del sur del Líbano sin que interfirieran las fuerzas de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano [FPNUL] o el ejército libanés.

El domingo, en una inusual declaración a los medios ingleses, Hagari advirtió a la comunidad internacional que Jizbolá está llevando a Israel “al borde de lo que podría ser una escalada más amplia, una que podría tener consecuencias devastadoras para el Líbano y la región”.

Hagari, que emitió la advertencia la víspera de la llegada de Hochstein, enfatizó que “Jizbolá está poniendo en peligro el futuro del Líbano, al convertirse en un escudo para Hamás; un escudo para los terroristas que asesinaron ancianos; violaron a mujeres; quemaron niños y judíos; musulmanes y cristianos secuestrados; durante su masacre del 7 de octubre”.

Publicado el 18 de junio de 2024

 

Traducido por Chuy González – Voluntario en Puentes para la Paz

 

Publicado en junio 18, 2024

Fuente: Porciones de un artículo por Itamar Eichner, Lior Ben Ari, Yair Kraus originalmente publicado por Ynetnews, el 18 de junio de 2024. (El vocabulario respecto al tiempo ha sido modificado para reflejarse en nuestra publicación del día de hoy). Puedes ver el artículo original en este link.

Fotografía por: Paul Keler/Flickr.com

Fotografía con licencia: Flickr