Shaná Tová (“Feliz Año Nuevo”) de nuestra parte: Puentes para la Paz

octubre 8, 2024

Los israelíes mojan manzanas en miel en Rosh HaShaná para dar la bienvenida a un dulce Año Nuevo (ilustración).

La puesta del sol del 2 de octubre marcó el comienzo de Rosh HaShaná, que en hebreo significa “cabeza del año”, y marca el comienzo del año 5,785 en el calendario judío.

Aunque Israel reconoce el calendario gregoriano, las fiestas y festividades bíblicas están determinadas por el calendario del que leemos en las Escrituras. Rosh HaShaná es la fiesta de dos días que se celebra el primer y segundo día del séptimo mes; el mes de Tishrei.

Rosh HaShaná también se conoce como la ‘Fiesta de las Trompetas’, Yom HaTeruá en hebreo (el Día del Fuerte Sonido). La razón de estos nombres se encuentra en las instrucciones que Dios le dio a Moisés con respecto a esta fiesta, en Levítico 23:23-24 (NBLA): Otra vez el Señor habló a Moisés: «Di a los israelitas: ‘En el séptimo mes, el primer día del mes, tendrán día de reposo, un memorial al son de trompetas, una santa convocación’”.

Hoy, miles de años después, los hijos de Israel siguen siendo fieles a las instrucciones de Dios. En Rosh HaShaná, el eco del shofar o cuerno de carnero, se escucha por toda la Tierra de Israel. El sonido del shofar es un llamado de atención para la temporada y significa, el reconocimiento del pueblo del Reinado de Dios.

Sin embargo, Rosh HaShaná tiene un significado adicional. La festividad señala el comienzo del tiempo más sagrado del año en el calendario judío.

“Los 10 días entre Rosh HaShaná y Yom Kipur (Día de la Expiación) se denominan los ’10 Días de Reverencia’”, explica la Rvda. Rebecca J. Brimmer, presidenta internacional de ‘Puentes para la Paz’. “Este periodo de 10 días es típicamente un tiempo de introspección solemne, un tiempo de búsqueda en tu alma y de arreglar las cosas entre tú y Dios, así como con tu prójimo”.

Rosh HaShaná se celebra tradicionalmente como el “Año Nuevo” judío. Encontramos la razón en la Mishná, que es el primer registro escrito de la tradición judía. “El primero de Tishrei es el comienzo del año, en lo que respecta a [el cálculo de] los años, del ciclo de shmitá (séptimo año que permite que la tierra descanse), el ciclo de Yovel (Jublieo), para plantar [árboles] y para producir” (Rosh HaShaná 1:1).

El autor y rabino Arthur Waskow aclara aún más: “Este es entonces el año nuevo para aprender cómo un ser humano puede volverse hacia Dios. Tal vez sea la cabeza del año porque la cabeza se eleva hacia el cielo, lejos de la tierra, mientras que Pesaj [Pascua] celebra la liberación más terrenal, la libertad de nuestros cuerpos [de la esclavitud en Egipto]”.

Las celebraciones del día de Año Nuevo el 31 de diciembre en el occidente secular, suelen estar marcadas por fiestas lujosas y alegría. El Año Nuevo hebreo es diferente. La atmósfera de Rosh HaShaná es de reverencia y devoción, descrita por algunos como “alegría moderada”.

“Cuando escucho los sonidos del shofar en Rosh HaShaná, reflexiono sobre estos pensamientos y me siento uno con el pueblo judío”, dice Brimmer. “Me encuentro examinando mi corazón para ver si hay algo que necesito corregir. ¿Hay relaciones que necesitan ser reparadas? ¿De qué me está hablando Dios? ¿En qué necesito concentrarme para convertirme en la mujer que Dios ha planeado que sea?”.

En una típica fiesta de Rosh Hashaná, las mesas están repletas de comida en abundancia, lo que significa la esperanza de que el año que viene sea fructífero y próspero. Hay manzanas bañadas en miel, para simbolizar el deseo de un dulce año nuevo. El pescado, cocinado con la cabeza aún adherida; para sugerir que es la cabeza del año; se sirve a menudo como plato principal. Los alimentos redondos también son los favoritos en todas las mesas de las festividades, para representar el ciclo en que se dan todos los eventos.

Sin embargo Israel sigue enfrentando el conflicto actual en su año 5,785, con esperanza. Gracias al ingenio de su sistema de inteligencia y defensa; lo que hace apenas dos semanas parecía una guerra inevitable contra Jizbolá; se ha reducido en gran manera. Israel sigue ganando terreno contra Hamás en Gaza. Es una buena noticia sin duda, pero en última instancia no es la fuente de la esperanza de Israel.

Al igual que sus antepasados, Israel sigue levantando la vista a los montes y sigue llegando a la misma conclusión sobre la fuente de su fuerza. Mi ayuda viene del Señor, que hizo los cielos y la tierra. No permitirá que tu pie resbale; no se adormecerá el que te guarda. Jamás se adormecerá ni dormirá el que guarda a Israel (Salmo 121:2-4 NBLA).

Desde Jerusalén, la capital eterna de Israel y del pueblo judío; desde la ciudad de nuestro Dios y la ciudad del gran Rey (Salmo 48:1-2); Puentes para la Paz te desea a ti y a tu familia “jag sameaj” (felices fiestas); de la misma manera que a los seres queridos en Israel se les saluda en Rosh Hashaná: “L’shaná tová tijatvú” (que estés inscrito para un buen año).

Publicado el 2 de octubre de 2024

 

Traducido por Chuy González – Voluntario Puentes para la Paz

Publicado en octubre 8, 2024

Fuente: Un artículo por Ilse Strauss, originalmente publicado por Bridges For Peace (Puentes para la Paz), el 2 de octubre de 2024. (El vocabulario respecto al tiempo ha sido modificado para reflejarse en nuestra publicación del día de hoy).

Fotografía por: Joshua Bousel/flickr.com

Fotografía con licencia: Flickr