La Biblia dice que vendrá un día cuando “…forjarán sus espadas en rejas de arado, y sus lanzas en podaderas. No alzará espada nación contra nación, ni se adiestrarán más para la guerra” (Isa. 2:4). Anhelamos la llegada de ese día, pero todavía vemos totalmente lo opuesto. Los juguetes inocentes son convertidos en armas terroristas. Hamás, el grupo terrorista que gobierna la Franja de Gaza, ha encontrado otra manera de aterrorizar a Israel por medio de sus cometas incendiarios. Hoy día, casi todo el sur de Israel ha sido quemado. Innumerables fuegos han sido prendidos de esta manera, aterrorizando las comunidades en el sur. Se estima que como 600 cometas y globos incendiarios han sido lanzados hacia Israel en los pasados dos meses, ocasionando incendios que han destruido gran parte de la cosecha de trigo y árboles frutales, una bella reserva forestal y grandes expansiones de bosques. Los bomberos y voluntarios comunitarios han estado trabajando las 24 horas para evitar que las llamas consuman a las comunidades judías.
Las nuevas armas terroristas de Hamás no son herramientas rudimentarias. Un oficial del gobierno me dijo que usan cometas avanzados y muy bien construidos, donados por una nación bien-intencionada para proveer entretenimiento a los niños en Gaza. Pero en lugar de producir alegría y sosiego, los terroristas islámicos radicales de Hamás han robado esos juguetes y los han convertido en instrumentos maléficos con el propósito de aniquilar a Israel. Como resultado, los niños israelíes ya no podrán volver a disfrutar un cometa de manera inocente. La imagen que provocan los cometas les llenan de terror.
La situación en el sur de Israel es verdaderamente grave, y no hay evidencia de que esté disminuyendo. El terrorismo por cometa ha quemado casi 2,500 acres de tierras agrícolas y ha ocasionado millones de shékeles en pérdida. Se han perdido cosechas, sistemas de irrigación, vida silvestre y bosques, mientras los niños lloran del miedo. Los valientes bomberos están exhaustos, pero los cometas de destrucción continúan llegando.
Diariamente vemos horrorizados los informes noticiosos. Clamamos a Dios para que guarde al pueblo de Israel y les salve de esta nueva amenaza. Hemos preguntado de qué manera podemos ayudar, y averiguamos que la región de Eshkol es la más afectada por este terrorismo, la que comparte su frontera con Gaza. Nos dijeron que desesperadamente necesitan remolques anti-incendios especiales. Estos se manufacturan en Israel y pueden ordenarse para ser entregados casi de inmediato. Rápidamente enviamos el dinero para comprar dos remolques anti-incendios. Cuando el jefe de seguridad en Eshkol se enteró, literalmente lloró. No pudimos esperar para pedir donativos porque la crisis era GRANDE y la necesidad era INMEDIATA. Como no hubo suficiente dinero en nuestro fondo de Ayuda en Crisis, tuvimos que tomarlo prestado de nuestros fondos operacionales.
El apóstol Santiago dijo que “…la fe sin obras es estéril” (Sant. 2:20, NBLH). En Puentes para la Paz somos personas de gran fe. Amamos a Dios y a nuestro prójimo, según nos enseñó Jesús (Yeshúa). Nuestro prójimo aquí, el pueblo judío y la familia de Jesús, se encuentra padeciendo de estos viles ataques. Hemos respondido rápidamente en amor, pero la necesidad es mucho más grande de lo que podamos manejar. Necesitamos que ustedes, cristianos quienes aman a Jesús y desean demostrar su amor cristiano, respondan con generosos donativos para ayudar a restaurar lo que ha sido destruido. El primer paso es apagar el fuego, y entonces es necesario reemplazar los sistemas de irrigación para finalmente resembrar y restaurar la tierra.
Oramos para que usted responda prontamente con regalos financieros generosos hacia nuestro fondo de Ayuda en Crisis, lo que comunicará su amor y compasión hacia el pueblo de Israel.
Con esperanza y bendiciones desde Israel,
Rebecca J. Brimmer
Presidenta Ejecutiva Internacional
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