Sobrevivientes del Holocausto en Necesidad

diciembre 31, 2019

“En otros 10 o 15 años, ya no tendremos sobrevivientes del Holocausto entre nosotros. Este es el momento para cuidarlos.” Yo conversaba con Erez, un hombre con una visión y una carga muy especial. Se sentía responsable por proporcionar soluciones de vivienda económica a los ancianos de Israel con recursos extremadamente limitados. Hasta ese momento, había logrado ofrecer viviendas seguras y cómodas a 7,000 ancianos israelíes, la mayoría de ellos sobrevivientes del Holocausto provenientes de la antigua Unión Soviética. Sin embargo, 27,000 más permanecen en su lista de espera, desesperados por recibir ese limitado beneficio de vivienda pública.

A fines de 2018, había 221,000 sobrevivientes del Holocausto en Israel. El número se reduce cada mes, a medida que la población se vuelve cada vez más anciana y frágil. El Holocausto terminó en 1945, y los sobrevivientes de hoy eran jóvenes en ese tiempo. Hoy día, después de experimentar indecibles horrores y angustias, están en el capítulo final de sus vidas.

En Puentes para la Paz, es nuestro honor y privilegio el ayudar con amor a muchos sobrevivientes, llevándoles comida, alegrando sus días solitarios y siendo las manos y pies que satisfagan sus necesidades.

Shelly con su nueva manta tejida

Shelly es una de esos preciosos sobrevivientes del Holocausto a quien ayudamos. Ella emigró a Israel con su esposo, y la pareja se apoyaba mutuamente con amor, compañía, fortaleza y ​​consuelo. Por supuesto, Puentes para la Paz estaba allí para llenar sus alacenas vacías y poner comida en su mesa, procurando que los años dorados de esta querida pareja fuesen lo más cómodos posible.

El esposo de Shelly falleció hace un año, dejándola sin su fuente de compañía y consuelo. Dado que la pareja estaba registrada bajo el nombre de su esposo para recibir las entregas de Puentes para la Paz, ella estaba atemorizada de que ya no recibiría el paquete de alimentos del que dependería para sobrevivir, y que ella tendría que enfrentar los fríos meses de invierno de manera sola, hambrienta y asustada. Qué bendición le fue asegurar a Shelly que Puentes para la Paz continuaría a su lado y que podría depender de nosotros como lo había hecho en el pasado.

Ahora que Shelly es viuda, necesita más ayuda que antes. Cuando nuestros voluntarios llaman a su puerta, siempre los espera con una lista de favores adicionales. Necesita ayuda con cosas que una anciana no puede hacer por sí misma, cosas que su esposo solía atender antes de partir. Es nuestro privilegio atender ahora a sus necesidades.

Este mes, nuestra entrega a Shelly contenía más que el usual saco de comida. También le llevamos una canasta de cumpleaños llena de deliciosas golosinas y una hermosa manta tejida a mano hecha por una cristiana en Australia. Shelly ahora sabe que no vivirá sola sus últimos años. Gracias a Puentes para la Paz y a cristianos de todo el mundo, ella todavía tendrá amor, apoyo, sustento y compañía.

Muchos sobrevivientes del Holocausto llegaron a Israel después de la Segunda Guerra Mundial y han construido vidas y familias aquí. Sin embargo, al terminar la guerra, muchos otros quedaron atrapados en la antigua Unión Soviética. Cuando finalmente se les hizo posible venir a Israel, comenzaron a llegar. Ya eran ancianos y a menudo no tenían reservas financieras. Dejaban atrás en sus previos países las pequeñas pensiones que recibían (generalmente US $80 o menos por mes). Ese grupo de inmigrantes sobrevivientes del Holocausto todavía tienen enormes necesidades. Israel actualmente les otorga una pensión o asistencia social de alrededor de US $800 por mes, pero eso es aún insuficiente para vivir. Sus apartamentos, por pequeños y mal equipados que sean, cuestan más de US $1,000 por mes y necesitan reparaciones urgentemente. Para poder llegar al fin de mes, cinco o seis de estos sobrevivientes mayores de edad a menudo viven juntos en un pequeño apartamento para aminorar los costos.

Israel construye viviendas para ancianos en todo el país para tratar de resolver esta difícil situación. Se les proporcionan apartamentos de una habitación a una pareja de ancianos o un estudio para sobrevivientes solteros a un costo mínimo. Ellos pagarán sólo US $75 por mes, además de sus servicios de luz, agua y gas. Esto les permite usar sus fondos limitados para cubrir sus necesidades médicas y alimentos. Fuimos a visitar a uno de esos edificios en Jerusalén. Aunque pequeño, el apartamento estaba bien equipado y limpio. Los residentes también reciben otras asistencias, si la necesitasen.

El gobierno israelí y la Agencia Judía se han unido para cubrir el 82% de los costos de esos nuevos edificios. Se necesita completar el restante 18% de los costos por medio de donantes de todo el mundo. Nos han pedido a Puentes para la Paz que ayudemos. Cada uno de los apartamentos cuesta US $75,000.

Ahora es el momento de mostrar nuestro amor a los sobrevivientes del Holocausto, mientras todavía están con nosotros. Muchos, como Shelly, son inmigrantes, están solos y viven con el recuerdo perturbador del Holocausto. Imagínese tener que lidiar con esas situaciones traumáticas, cada una difícil de por sí. En Puentes para la Paz, estamos comprometidos a amarlos, alimentarlos, arreglar sus apartamentos, llevarles regalos y visitarlos. Ahora también les ayudaremos a proporcionar un hogar donde puedan vivir con dignidad y seguridad.

Su donativo hacia nuestro Fondo para Sobrevivientes del Holocausto mostrará a estas personas que los cristianos los aman y cuidan de ellos. “…en cuanto lo hicieron a uno de estos hermanos Míos, aun a los más pequeños, a Mí lo hicieron” (Mateo 25:40).

Bendiciones desde Israel,
Rebecca J. Brimmer
Presidenta Ejecutiva Internacional

 

Traducido por Teri S. Riddering,
Coordinadora Centro de Recursos Hispanos