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Philippe Lazzarini, comisionado general de la UNRWA, negó las acusaciones de que más de 450 terroristas, principalmente Hamás, sean empleados de la UNRWA.
El lunes, el knéset [parlamento] de Israel declaró ilegal que la Agencia de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas (UNRWA) opere en territorio israelí y que los funcionarios estatales cooperen con la agencia.
Las dos leyes fueron aprobadas por una gran mayoría tras la denuncia de la complicidad del personal de la UNRWA en la masacre de Hamás del 7 de octubre de 2023, y a pesar de la presión de Estados Unidos y otros países contra la medida.
La Administración Biden estaba “profundamente preocupada” por la legislación, según un funcionario anónimo del Departamento de Estado de EE.UU. citado por Axios. Esto se hace eco del lenguaje utilizado por el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, antes de la votación.
Josep Borrell, Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, tuiteó que las nuevas leyes “harían imposibles de facto las operaciones vitales de la UNRWA en Gaza y obstaculizarían gravemente su prestación de servicios en Cisjordania [Judea y Samaria]”. Las leyes están “en total contradicción con el derecho internacional y el principio fundamental de humanidad”, añadió.
El Comisionado General de la UNRWA, Philippe Lazzarini, tuiteó que la legislación “se opone a la Carta de la ONU y viola las obligaciones del Estado de Israel bajo el derecho internacional”.
Sin embargo, los expertos en la UNRWA, incluido el ex legislador israelí Einat Wilf, que ha escrito un aclamado libro sobre la agencia, cuestionan que la legislación contradiga el derecho internacional. Israel no es parte de ningún tratado que lo obligue a colaborar con el grupo o permitir sus actividades, dijo Wilf a JNS.
Las dos leyes son, con diferencia, el impulso parlamentario más sólido de Israel contra la UNRWA, cuyos mayores donantes son Estados Unidos y la UE. La agencia ha sido acusada durante décadas de proporcionar cobertura e ingresos a terroristas palestinos y al mismo tiempo socavar los esfuerzos de paz.
La ley que prohíbe la actividad de la UNRWA en territorio israelí, redactada por el miembro del knéset Boaz Bismuth (Likud) y otros seis legisladores de la coalición, fue aprobada por una mayoría de 87 de los 120 legisladores del knéset. Nueve diputados presentes votaron en contra de la ley y uno no votó. Los 23 legisladores restantes no estuvieron presentes en la votación.
“La Agencia UNRWA no operará ninguna representación, no proporcionará ningún servicio ni realizará ninguna actividad, directa o indirectamente, en el territorio soberano del Estado de Israel”, afirma la ley en coautoría de Bismuth.
La segunda ley, aprobada por 92 votos a favor y 10 en contra, establece: “Ninguna autoridad estatal, incluidas entidades e individuos que ocupan legalmente cargos públicos, entablará contacto alguno con la UNRWA o sus representantes”. Esta legislación fue coautora de los parlamentarios Yulia Malinovsky (Yisrael Beiteinu), Dan Illouz (Likud) y Ron Katz (Yesh Atid).
“La UNRWA no operará en Israel, se cancelarán sus beneficios y se prohibirá su entrada a Israel. Desconexión total”, tuiteó Malinovsky después de las votaciones.
Según su sitio web, la UNRWA emplea a unas 30.000 personas, la mayoría de ellas palestinas, incluidas 13,000 en la Franja de Gaza. También cuenta con personal en Judea y Samaria y en Jerusalén oriental. La UNRWA también opera en Jordania y el Líbano.
Su prohibición en Israel podría poner fin al trabajo de la UNRWA en Jerusalén y complicar enormemente sus operaciones en Gaza y Judea y Samaria, donde la organización depende al menos parcialmente de la cooperación israelí.
A raíz de las masacres del 7 de octubre en Israel, en las que los terroristas de Hamás asesinaron a unas 1,200 personas y secuestraron a otras 251, surgieron pruebas de la complicidad del personal de la UNRWA en esas atrocidades y otros actos de terrorismo.
Por ejemplo, Faisal Ali Mussalem al-Naami, trabajador de UNRWA, y un colega fueron capturados en video cargando el cuerpo del israelí Yonatan Samerano en un vehículo en Sderot.
Según Israel, la UNRWA también emplea a más de 450 terroristas pertenecientes a organizaciones terroristas de Gaza, principalmente Hamás. Lazzarini, de la UNRWA, ha negado rotundamente estas acusaciones.
El 29 de septiembre, Hamás admitió que Fatah Sharif Abu al-Amin, presidente de la Asociación de Maestros de la UNRWA, era su comandante en el Líbano. La agencia había suspendido a Abu al-Amin en marzo, pero después de su muerte negó saber que estaba involucrado en terrorismo.
El profesor de árabe Yusef Zidan Suleiman al-Hawajara, empleado de la UNRWA, fue grabado fanfarroneando ante un amigo el 7 de octubre sobre la captura de una rehén. (“Tenemos mujeres rehenes, ¡capturé a una!”, dice en una grabación publicada por las Fuerzas de Defensa de Israel [FDI]).
En julio, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel publicó una lista de nombres y números de identificación de 108 empleados de la UNRWA a los que Israel acusa de ser terroristas de Hamás. Era una “pequeña fracción”, escribió un funcionario del Ministerio de Asuntos Exteriores, de una lista mucho más grande que incluía a cientos de miembros de Hamás y de la Yihad Islámica Palestina que también trabajaban para la UNRWA. La lista más amplia no pudo publicarse debido a consideraciones de seguridad.
El 13 de octubre, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, y el secretario de Defensa, Lloyd Austin, enviaron una carta sobre la agencia al ministro de Asuntos Estratégicos israelíes, Ron Dermer, y al ministro de Defensa, Yoav Galant. En la carta, que exigía a Israel que aumentara la cantidad de ayuda que permitía entrar a la Franja de Gaza controlada por Hamás, señalaron que estaban “profundamente preocupados” por los proyectos de ley del knéset.
La UNRWA tenía un presupuesto de alrededor de 1.100 millones de dólares en 2023. Dieciocho países suspendieron la financiación de la UNRWA tras el ataque del 7 de octubre, incluido Estados Unidos, que proporciona aproximadamente un tercio del presupuesto de la organización. Estados Unidos congeló sus donaciones a la UNRWA hasta marzo de 2025. Sólo él y Nueva Zelanda aún no han restablecido su financiación.
A través de la UNRWA, la ONU emplea una definición única de refugiado para los palestinos. La agencia define como refugiados no sólo a aquellos que huyeron de la guerra de 1948, sino a sus descendientes a perpetuidad hasta que surja una “solución justa” para su estatus. La ONU emplea una definición diferente para todos los demás refugiados, que no pueden transmitir el título a sus descendientes y a menudo lo pierden cuando se naturalizan en otro lugar.
Esto ha perpetuado el conflicto israelí-palestino según muchos críticos, incluido Hillel Neuer, fundador de UN Watch.
La razón por la que la ONU insiste en proporcionar servicios a través de la UNRWA en lugar de muchos otros organismos de ayuda de la ONU es que «el objetivo de la UNRWA«, que se creó en 1949, «es continuar la guerra de 1948 y desmantelar a Israel», dijo Neuer. JNS a principios de este mes.
Publicado en octubre 29, 2024
Fotografía por: Ali Ahmed/Flash90/jns.org
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