“No exagero cuando digo que viví varias experiencias cercanas a la muerte. Las balas pasaron por encima de mi cabeza y las explosiones cerca de mí. Tengo suerte de haber salido de Gaza ileso”, dijo el martes a JNS Sam Sank, de 33 años, de Tel Aviv.
“Incluso decir eso me hace sentir un poco culpable porque muchos no regresaron con vida, algunos los conocía personalmente. Aunque estoy feliz por mí mismo, todavía siento tristeza”, añadió.
Sank, hijo único, nacido y criado en Londres; se mudó a Israel a la edad de 18 años y se unió a la Brigada de Paracaidistas. Fue uno de los aproximadamente 360,000 soldados de reserva, movilizados después de que los terroristas de Hamás invadieran el noroeste del Néguev el 7 de octubre y asesinaran a unas 1,200 personas.
“Me desperté con el sonido de las sirenas de cohetes que venían. Encendí las noticias y rápidamente me di cuenta de que, Israel estaba en guerra. A las 4 p.m. estaba en la base con mi arma y equipo, listo para ser desplegado”, dijo Sank.
El 9 de octubre, Sank fue enviado al kibbutz Kfar Aza para luchar contra los terroristas que habían llevado a cabo una matanza allí y todavía andaban sueltos dentro de la comunidad.
“Ver las atrocidades infligidas al kibutz [comunidad colectiva] fue una experiencia imborrable, por todas las razones equivocadas que puedas imaginar”, dijo.
El 3 de diciembre, casi dos meses después, Sank entró en la Franja de Gaza. Allí pasaría los siguientes dos meses.
“Empezamos en las afueras de Khan Yunis en un entorno rural y avanzamos hacia el centro de la ciudad. Pasamos la última semana al lado de los campos de refugiados, una zona muy peligrosa y muy poblada”, afirmó.
A partir del 7 de octubre, Sank pudo comunicar sus pensamientos a sus amigos y familiares, a través de un boletín de WhatsApp creado y administrado por su madre, Jacalyn Sank DaCosta, de 57 años; de Londres.
Sank dijo que la mayoría de los soldados, incluido él mismo; no abandonaron Gaza sintiéndose victoriosos. En cambio, están decepcionados de que 134 de los 253 israelíes y extranjeros que Hamás secuestró en Gaza el 7 de octubre, sigan en cautiverio.
“Era nuestro trabajo liberarlos, lo cual no pudimos hacer. Hicimos un buen trabajo y cumplimos nuestra misión, pero en general, nos sentimos bastante decepcionados”, afirmó.
Sank dijo que no podía entender las críticas generalizadas y las acusaciones de mala conducta hacia las Fuerzas de Defensa de Israel [FDI].
“Sólo puedo hablar de mi experiencia y de las cosas que vi. Mi estancia en Gaza quedó grabada con mi cámara GoPro, que tuve conmigo todo el tiempo. Habla de la forma en que me comporté”, dijo.
Desde el 7 de octubre, Sank ha hablado en los medios, compartiendo su historia y tratando de representar a los soldados israelíes como seres humanos, con emociones reales que atraviesan la experiencia caótica de la guerra.
Sus apariciones en los medios llevaron a Sank a recibir correos de odio y a ser objeto de abusos en línea. Después de su liberación del ejército, viajó a Nueva York, donde asistió a un evento de comedia judía con su novia, Amit; y fue emboscado por manifestantes pro palestinos.
“No sabían quién era yo, ni qué había hecho. Si hubieran sabido, se hubieran enojado más. Nos siguieron por la calle, llamándome asesino de bebés y nazi, diciendo que esperaban que me muriera”, dijo Sank.
«Estaba realmente más asustado y más traumatizado por este incidente en Nueva York, que durante todo el tiempo que pasé en Gaza», añadió.
Si bien está preocupado por la situación en lugares como Londres, Nueva York y París, diciendo que no parecen ser lugares seguros para los judíos en este momento, e incluso, le traen recuerdos del Holocausto; Sank no planea retirarse de su `hasbara´ (actividades de diplomacia pública).
Sank dijo: «Seguiré defendiendo a Israel en cada aspecto de mi vida».
Inteligencia militar
El 7 de octubre, a unos14.4 kilómetros de Tel Aviv; Asaf Nissan, de 34 años, productor de televisión del Canal 14 y oficial de inteligencia militar de reserva; estaba pasando la fiesta de `Simjat Torá´ [el regocijo por la Torá] en Petaj Tikva, en casa con su esposa, Chen, de 31 años, y su pequeña hija Danielle.
“Como oficial de inteligencia, no pude hacer mucho el 7 de octubre. Estaba en espera. El 9 de octubre dejé mi coche en Herzliya y me llevaron en un autobús blindado a Sde Teman, a una base logística situada entre Beersheva y muy cerca de la Franja de Gaza”, dijo Nissan a JNS el miércoles.
“Estábamos actualizados sobre la situación. Se habló de entrar en Gaza una vez que las ciudades y pueblos israelíes devastados quedaran libres de terroristas. Necesitábamos asegurarnos de que no dejaran bombas, minas ni nada que pudieran usar contra nosotros”, añadió.
Como oficial de inteligencia que ayuda a las unidades de combate de forma remota, Nissan proporcionó información a los soldados en el campo de batalla. Estar en el puesto de inteligencia tiene sus desafíos en un entorno en constante cambio. Los oficiales de inteligencia deben estar alerta en todo momento. Nissan pasó un total de 109 días en servicio de reserva.
“Al principio no podía volver a casa. Mi hija sólo tiene un año y 10 meses. Mi esposa tuvo que encargarse de todo ella sola. Estaba durmiendo en casa de sus padres, tenía que despertarse en medio de la noche y mantener al bebé ocupado durante el día”, dijo.
“Más tarde, debido a que reclutaron a más personas, tuvimos suficiente personal para elaborar un cronograma adecuado. Podría volver a casa dos o tres veces por semana”, añadió.
Los soldados de reserva reciben su salario completo de su empleador, que es reembolsado por el Instituto Nacional de Seguros. Nissan dijo que incluso, recibió una bonificación del 40% mientras estaba fuera.
Como productor de televisión, no sintió que pudiera desconectarse por completo, ni siquiera cuando dejó la base.
“Nunca dejo de estar actualizado sobre la guerra. Lo vivo día tras día. Realmente no hay ningún tipo de distancia”, dijo Nissan.
“En mi opinión, siempre estoy listo. Si pasa algo en el norte, volveré al frente; ni siquiera lo dudaría”, añadió.
Publicado el 14 de marzo de 2024
ENFOQUE DE ORACIÓN: Oremos por los reservistas que están intentando encontrar “normalidad” en sus vidas mientras enfrentan su tipo específico de trauma. Habiendo sido testigos de horribles atrocidades que no pudieron evitar, oremos para que sus sentimientos de impotencia y desilusión sean reemplazados por una confianza renovada. Oremos por Sam Sank mientras intenta restablecerse sin culpa ni arrepentimiento, y pidamos al Señor que lo fortalezca mientras aboga por Israel.
VERSO BÍBLICO: «Mas ahora, así dice el Señor tu Creador, oh Jacob, y el que te formó, oh Israel: «No temas, porque Yo te he redimido, te he llamado por tu nombre; mío eres tú. Cuando pases por las aguas, Yo estaré contigo, y si por los ríos, no te cubrirán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama te abrasará. Porque Yo soy el Señor tu Dios, el Santo de Israel, tu Salvador«.
–Isaías 43:1-3a NBLA
Publicado en marzo 15, 2024
Fotografía por: Courtesy of Sam Sank/jns.org
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